Con los textos "tejiendo en la red", (María Cándida), y "la objetividad es sólo un concepto", (entrevista a Maturana en el diario el mercurio), desarrollamos en forma individual un mapa conceptual que sintetiza ambos textos. Luego de la exposición de los trabajos, realizamos una reflexión acerca de la importancia que tiene el conocer las diferentes realidades de los estudiantes, considerando que es lo que saben según el contexto en el que están insertos, para que éste sea el punto de partida para generar nuevos aprendizajes y que sean apropiados de tal forma que los relacionen en su experiencia.
Ficha explicativa del mapa conceptual
El cambio de paradigma sufrido en el último tiempo tras el paso de "la sociedad industrial" a la "sociedad del conocimiento", trae consigo demandas que deben ser resueltas por medio de la educación. Estamos sometidos a un permanente cambio y a un amplio flujo de información de fácil acceso y disponibilidad, esto implica generar competencias acordes a estos nuevos tiempos, de allí la importancia de la implementación de las TIC en el aula para producir conocimiento y aprendizaje significativo. La problemática que surge es de que forma se utiliza este tipo de herramientas para producir las competencias adecuadas y oportunas.
Una serie de investigaciones ponen en evidencia que si se implementa las TIC con el paradigma tradicional de educación, que es conductista e instruccional, no se logra la formación de personas creativas y reflexivas frente a su propio aprendizaje, más bien se forman personas incompetentes, incapaces de pensar, reflexionar, construir y reconstruir su conocimiento, pues, en este modelo pedagógico las practicas son más instruccionales y los estudiantes son pasivos frente a su aprendizaje pues se limitan a hacer trabajos de forma mecánica y a responder sólo lo que se les pide, entonces con que fin se implementan las TIC si no se logra ningúna competencia pertinente a los tiempos, además otro tipo de problematicas que surgen es con respecto al acceso a la tecnologia misma, la ausencia de modelos adecuados en la formación docente para el uso competente de TIC.
y además de metodologías adecuadas para su implementación.
Las nuevas tecnologías de información y comunicación deben fomentar el desarrollo de procesos de contrucción de aprendizaje, por parte del estudiante, además deben generar espacios de aprendizaje donde se formen valores y se creen nuevas representaciones de la realidad para así promover la autonomía, el pensamiento reflexivo, la creatividad, la cooperación, solidaridad, etc. Por esta razón se hace necesario un cambio de paradigma para poder concretar las demandas de esta nueva sociedad del conocimiento.
El paradigma eco-sistémico, consiste en una red de relaciones, en donde dialogan e interactúan tanto la sociedad, la cultura y la naturaleza, no se ve la persona aislada del medio, sino, como parte de él. Éste paradigma es constructivista, interaccionista, sociocultural y transdiscipliario. Considera a la educación como un sistema abierto en donde el docente es articulador y guía del conocimiento y debe tener presente que siempre va a estar sujeto a constantes cambios e imprevistos, que pueden hacer modificar su actuar en el aula dependiendo de las necesidades que vallan surgiendo. El aprendiz es un micro-actor dentro del sistema de interacciónes, es un participante más que construye su propio conocimiento. El curriculum en éste paradigma, es dinámico y flexible, para así ajustarse a las necesidades. Lo principal es fomentar valores de respeto , solidaridad y entender que convivimos en el mismo sitio y debemos cuidarlo para vivir mejor.
En esta red de relaciones en donde no es ailada la persona del medio, no es posible la objetividad, pues según Maturana, las personas aprendemos según lo que persiven nuestros sentidos, lo que de alguna forma nos limita y al mismo tiempo nos hace persivir lo que queremos y además somos personas distintas por lo que la objetividad sería solo un concepto y una forma covencional para definir algo en particular. Además hace alusión a que el error no es error desde un comienzo, pues en un principio al enfrentarnos a la realidad, damos por válido lo vivido, hasta que rectificamos lo concluido y luego le damos el valor de error, pero la experiencia propiamente tal no es errror, hasta que hay otra experiencia que nos hace modificarla.